Tratamiento de la rotura de menisco
Un tratamiento no invasivo y naturalmente regenerativo de la rotura de menisco sin cirugía.
Un tratamiento no invasivo y naturalmente regenerativo de la rotura de menisco sin cirugía.
Tenemos 60 años de experiencia combinada y más de 30.000 procedimientos realizados
Rodeando la rótula y la tibia hay un cartílago gomoso llamado menisco, que actúa como estabilizador y amortiguador de la rodilla.
La rotura de menisco se produce cuando la rodilla se tuerce con fuerza, como en una lesión deportiva.
Aunque, afortunadamente, no se trata de una luxación de rodilla, se produce cuando se aplica presión a la rodilla (como desplazar el peso del cuerpo hacia ese lado) junto con una torsión enérgica.
Tu rodilla es esencialmente una articulación de bisagra, por lo que, cuando esa articulación se bloquea, es un indicio de que algo va mal. Otros síntomas de una rotura de menisco pueden ser hinchazón, dolor en una zona concreta (o en varias) de toda la articulación de la rodilla, chasquidos anormales y dificultad repentina para caminar o mover la rodilla como lo harías normalmente.
Para los distintos tipos de dolor de rodilla, tienes una gran variedad de opciones de tratamiento, pero no todas funcionan realmente.
Por ejemplo, la cirugía ha demostrado ser tan ineficaz como el placebo, mientras que los esteroides y la fisioterapia no han resultado mucho mejores.
Como alternativa, las terapias con células madre y plaquetas se dirigen a las zonas problemáticas con mayor precisión y son capaces de regenerar completamente tus células dañadas sin necesidad de cirugías invasivas.
Como ocurre con diversas lesiones, las inyecciones de células madre son uno de los tratamientos más elogiados universalmente para un menisco desgarrado.
No todos los desgarros son capaces de curarse por sí solos, y no todos los desgarros pueden repararse quirúrgicamente, por lo que un procedimiento que repare el menisco de forma natural es tu mejor opción.
Con casi 30 años de uso del procedimiento para tratar a atletas profesionales, las inyecciones de células madre naturales del cuerpo han demostrado ser la solución más precisa, eficaz y no invasiva para el tejido del menisco desgarrado o dañado.
¿Cómo funciona?
Las inyecciones de plasma rico en plaquetas (PRP) utilizan el propio sistema curativo de cada paciente para mejorar los problemas musculoesqueléticos. La terapia con PRP utiliza inyecciones con una concentración de plaquetas del propio paciente para acelerar la curación de tendones, ligamentos, músculos y articulaciones lesionados.
De este modo, las inyecciones de PRP utilizan el propio sistema curativo de cada paciente para mejorar los problemas musculoesqueléticos.
Estas inyecciones se aplican de manera ambulatoria, y el procedimiento completo, de principio a fin, dura unos 30 minutos.
¿Cómo funciona?
Aunque la enfermedad suele inmovilizar la articulación de la rodilla, una simple exploración física determinará las zonas problemáticas de forma más precisa y directa.
Es probable que el médico te pida que flexiones los dedos de los pies para comprobar hasta dónde puede moverse aún la rodilla, así como que gires la pierna mientras la mantienes estirada hacia delante, examinando tanto el menisco lateral como el medial.
Tras la exploración física con tu médico para un tratamiento a tu medida, puedes esperar que el procedimiento se lleve a cabo ese mismo día.
Para que esta intervención sea lo más suave y eficaz posible, solo es necesario beber agua (64 onzas al día durante al menos 2 días), dejar de tomar anticoagulantes y antiinflamatorios la semana anterior y tomar un sedante ligero y natural una sola vez, poco antes de la intervención.
El procedimiento en sí evita el dolor y puede realizarse en menos de una hora, por lo que algunos pacientes salen literalmente andando del quirófano una vez finalizado.
La recuperación es tan fácil como la propia intervención, aunque solo dura unas semanas más.
De hecho, podrías volver a tu trabajo al cabo de un día, pero se aconseja no realizar ejercicios extenuantes hasta pasadas unas 5 semanas (en promedio) de la intervención.
“Estoy libre de dolor.
He podido volver a hacer actividades que por un tiempo no podía hacer y nunca soñé que podría volver a alcanzar ese nivel.” – Julie Ingleston
“Me pusieron las inyecciones hace unos 3 años y ninguna de las mejorías se ha revertido, sigo sin sentir dolor”. – Bob Kendzior
“Poder correr 65 km en mi cumpleaños número 40 después de destrozarme la rodilla es una gran bendición para mí”. – Brian Yeso
“El Dr. Otten prolongó mi carrera unos 4 o 5 años”. – Evan Dunham